La Serra del Montsant es una sierra situada en la comarca del Priorato, en los términos municipales de La Morera de Montsant, Cabacés, Ulldemolins, Cornudella, Vilella Alta, Vilella Baja, La Bisbal de Falset, La Figuera y Margalef de Montsant. Forma parte de la Cordillera Prelitoral y ocupa una extensión de unos 135 km². Sus cimas principales son la Roca Corbatera (1.163 m), el Piló dels Senyalets (1.107 m)1 y la Cogulla (1.062 m).
Está constituido predominantemente por conglomerados que forman riscos en la cresta principal (Sierra Mayor), situada en la parte meridional y alineada de SW a NE, acompañados de margas que dan pie a numerosas cuevas. En la vertiente norte, de relieve más suave, hay numerosos barrancos que desembocan al Río Montsant.
El Montsant acoge diversas ermitas de larga tradición, como la de la Mare de Deu del Montsant, Santa Magdalena, San Bartolomeo (de estilo románico) y San Juan del Codolar, entre muchas otras, y a su pie se encuentra la histórica Cartuja de Escaladei, fundada en el siglo XII.
La ruta de hoy se inicia en Albarca, pequeñísima localidad que ha quedado reducida a lugar de veraneo y centro de acogida de excursionistas, pues dispone de un refugio. Tras acercarnos al Collet Roig por pista, iremos siguiendo luego el GR-171 que nos meterá de lleno en la Serra del Montsant por un sendero muy trillado.
Al rato, el sendero desemboca en pista forestal y por ella subimos hasta el Pla del Grau, donde de nuevo un sendero marcado nos llevará a visitar la Ermita de Santa Maria de Montsant.
Retornamos sobre nuestros pasos para abandonar el GR-171 y tomar el sendero también marcado que nos llevará hasta el punto más alto de la Serra del Montsant: la Roca Corbatera (1.163 m).
Estamos en lo alto de la Serra Major, y vamos a ir avanzando en dirección SO sin perder demasiada altura, hasta llegar al inicio del Barranc de la Bruixa. Justo en este punto encontraremos una figura metálica de un Cristo.
Descendemos por el Barranc de la Bruixa para ir a visitar 2 cuevas: la Cova Abelló y la Cova Serret, previo paso por la base de una roca característica llamada Cap de Gos. Como en todo momento, por un sendero muy evidente. Tras la visita a las cuevas, retornaremos a lo alto de la Serra Major, donde el Cristo metálico, por el mismo camino por donde bajamos.
Un corto pero empinado descenso me acerca ahora hasta la entrada de la Cova Santa, pero sin frontal no se me ocurre entrar y desde la entrada no veo nada. Como premio, todo lo que bajé para llegar aquí hay que volver a subirlo... vaya que podía haber seguido por la cresta y saltarme esta visita.
Seguimos recorriendo lo alto del Montsant dirección Oeste por un camino que vuelve a ser GR, en concreto el GR-174-1. Pasamos de largo el desvío que baja hacia el Grau del Carabassal pero no nos saltamos el que va al Grau del Carrasclet.
Debemos estar atentos en todo este sendero y seguir los hitos, que son abundantes, pues el terreno es de mucha piedrilla y tierra suelta y bajando es fácil resbalarse y darse algún culetazo. Así hasta que llegamos a los tramos equipados. De todos los "graus" del Montsant, este es el más "atrevido". Sin duda, mejor hacerlo en subida que no en bajada, como me ha tocado a mi.
Tras los pasos equipados, un rato más de bajada sorteando pedruscos y evitando resbalones hasta llegar a un sendero mucho más amable, que nos irá acercando a La Morera de Montsant. Un poco antes, pasaremos junto a Les Tres Roques, también señalizado este lugar.
No llegaremos a entrar en Morera de Montsant, pues cuando estamos muy cerca ya encontramos el sendero que nos subirá nuevamente a lo más alto de la Serra Major por el Grau de la Grallera. Es abrupto, aunque no será necesario poner las manos.
Una vez en lo alto, en dirección Oeste y siguiendo el Camí de Capçada (el camino que recorre por todo lo alto la Serra Major) llegaremos a la segunda cumbre del Montsant, el Piló dels Senyalets (1.107 m).
Media vuelta y ahora tenemos más de 4 kilómetros siguiendo este Camí de Capçada, perfectamente definido y siempre por lo más alto de la Serra del Montsant. A medio camino, se convierte también en GR.
Tras esos 4 kilómetros, llegamos al desvío que baja hacia el Grau del Carabassal. Por ahí bajamos. Fuerte pendiente, nuevamente atentos a los resbalones aunque si patinas solamente es el culetazo lo que te llevas, pues no hay patio. No llegaremos a los pasos equipados. Antes de eso, cogeremos otro sendero que nos llevará por la base de los paredones Sur del Montsant. Es la parte más salvaje y espectacular de la ruta y aunque no cuesta mucho seguir el sendero, mejor no despistarse.
Salimos de esta especie de flanqueo muy cerca de la Cova Santa, a la que ya no me acerco porque sigo sin llevar frontal, jeje.
Hay que seguir bajando, y me posiciono sobre el GR-174-1 para hacerlo por el Grau del Tomaset. Tampoco aquí será necesario poner las manos, además al ser GR está muy definido el camino. La parte alta es la más entretenida, sorteando grandes bloques de roca.
Cuando ya hemos descendido, un desvío marcado con una flecha hecha de piedras nos hace abandonar este GR y meternos de lleno en el GR-174, que en poco rato nos acercará hasta Sant Joan del Codolar. En esta ermita tenemos fuente, barbacoas... y se puede acceder en vehículo.
Desde aquí y hasta Albarca, iremos siguiendo siempre el GR-174 por un sendero con poco desnivel, sin dificultades y que va siempre bajo los Cingles de Sant Joan. Quizás es la parte más monótona de la ruta, pues el paisaje siempre es el mismo y no hay desniveles que superar.
Finalizamos en Albarca, en el aparcamiento que hay frente al Refugio. Para ser mi primera incursión en esta zona he quedado satisfecho, y lo mejor es que todavía me quedan muchas cosas por descubrir aquí. Como anécdota, decir que en algunos momentos cayó nieve granulada... y eso que estamos a 29 de mayo!
Salimos de Albarca y tras unos cientos de metros por pista forestal, llegaremos a esta zona conocida como Collet Roig, donde este poste señalizador nos indicará la dirección a seguir. En nuestro caso, iremos hacia esa roca que hay detrás.
Estamos desde ese punto anteriormente citado sobre el GR-171, y vamos ganando altura por la cara Norte del Montsant. Mientras, al fondo, observamos el pueblo de Ulldemolins, protegido al norte por la Serra de la Llena.
El sendero alterna con tramos de pista. El sol empieza a hacer acto de presencia aunque es el viento el que me acompañará durante toda la excursión.
Un tramo de pista hormigonada.
Hacia el Sur, el Pantano de Siurana y el pueblo de Cornudella de Montsant cerca. Detrás la Serra del Molló, con alturas que no llegan a los 1.000 metros.
El sendero continúa subiendo ahora por la vertiente Sur del Montsant, más abrupta y escarpada que la norte.
Vistas hacia el sur.
Llego al Pla del Grau, donde el GR hace un giro brusco y encara dirección NO para ir hacia la Ermita de Santa Maria de Montsant.
Aquí la tenemos. La Ermita de Santa Maria de Montsant.
Una panorámica a la enorme roca que hay detrás de la ermita.
Ermita del S.XII, incluida en el Inventario del Patrimonio Arquitectónico Catalán.
Vuelvo sobre mis pasos y abandono el GR para tomar otro sendero señalizado que sube a la Roca Corbatera. Desde aquí aun puedo ver la ermita, asomada a la cara norte del macizo del Montsant.
Hacia el Sur voy ampliando las vistas del Pantano de Siurana y Cornudella de Montsant. Detrás la Serra de Pradell y la Serra d'Argentera que ya van a buscar el Mediterraneo.
Sendero sin ninguna dificultad el que nos subirá a lo más alto del Montsant.
Llego a la cima de la Roca Corbatera, punto más elevado de la Serra del Montsant.
Roca Corbatera (1.163 m).
Hacia el Sur, cornudella de Montsant, Pantano de Siurana y la Serra del Molló, con el Mediterraneo detrás.
Hacia el Oeste se prolonga la Serra Major, es toda la zona que seguiré a continuación.
Hacia el Norte la Serra de la Llena y el Pirineo todavía nevado al fondo.
Abajo Poboleda y al fondo la zona del Parc Natural dels Ports.
Viene algo de descenso, siempre disfrutando de las vistas que me ofrece esta magnífica mañana...
... aunque sufriendo algunas estrecheces. Para pasar por aquí hay que quitarse la mochila y meter la panza. El que esté de buen año, tiene la opción de rodear la roca y salir al otro lado atravesando la vegetación por donde mejor pueda. Es el llamado "Pas del Gat".
Pasamos junto la Font del Manyano, buen lugar para aprovisionarnos de agua en caso de que el dia sea caluroso.
No tardamos en llegar a otra bifurcación, siempre señaladas con estos postes metálicos. Hacia el norte iríamos al Barranc de la Bruixa, donde hay varias cuevas. Hacia el Sur, la Cova Santa y el Pla del Meloner. Hacia el Oeste, seguiríamos por el cordal de la Serra Major, en lo más alto del Montsant.
El Pla del Melonar por el Sur. Lo dejamos para luego, primero iremos a visitar las cuevas hacia el Norte.
La Cova del Meloner vista desde la encrucijada anteriormente mencionada.
Aquí mismo encontraremos esta figura metálica de un Cristo.
En el pie de la figura encontramos una mesa de orientación.
Vamos a bajar hacia el Norte, por el Barranc de la Bruixa. Con un nombre tan sugerente, no podemos saltárnoslo...
Al poco rato, pasaremos bajo esta roca que recibe el nombre de "Cap de Gos".
Bajando un poco más llegamos a la primera cueva, la Cova Abelló. Vemos que está obrada para recoger el ganado.
En la entrada de la cueva.
Algo más abajo, llegaré a la segunda cueva, la Cova del Serret.
Curiosa esta fuente que origina una estalactita y que nos permitirá llenar las cantimploras.
Un buen sitio para pasar la noche.
Tras la visita a las cuevas, desandamos el Barranc de la Bruixa para volver al cruce del Cristo metálico. Esto es el Barranc de la Bruixa visto desde arriba.
Ahora iremos hacia el Sur, bajando al Pla del Meloner para visitar la Cova Santa.
En el Pla del Meloner, tras una bajadita bastante resbaladiza por las piedrecillas sueltas.
Llego a la entrada de la Cova Santa, que es bastante estrecha, y me lamento de no haber traido el frontal, motivo por el cual me quedo sin entrar.
Zoom hacia La Mussara.
El Observatorio de la Miranda, en la Serra de Llabería.
Por ese sendero que se aprecia en los pequeños prados de abajo es por donde volveré. Ahora, seguiré hacia el Oeste por lo más alto de la Serra Major.
Poboleda, junto al rio Siurana, en la comarca del Priorat.
Nuevamente sobre el GR-171, continuaré por lo alto del Montsant...
... disfrutando en todo momento de grandes vistas hacia el Sur...
... mientras por aquí arriba está todo muy pelado, solamente algo de matorral da el toque verde a la zona.
Otra encrucijada. En todas encontramos uno de estos postes señalizadores, típicos de este macizo.
A medida que avanzamos, la cara Sur del Montsant se hace más escarpada y vertical.
Llegamos al desvío que ahora sí que tomaremos para ir a buscar la bajada hacia el Grau del Carrasclet.
Otro paso estrecho, esta brecha entre dos rocas. Más largo que el anterior pero menos "apretado", podremos superarlo sin problemas y con la mochila en la espalda.
Las vistas ahora ya son de vértigo, vemos como se desploma la cara Sur de esta parte del macizo del Montsant.
El primer tramo equipado ya nos hace subir la adrenalina. Primero un corto paso horizontal sobre el vacío, para llegar al descenso completamente vertical de la pared.
La pared descendida, vista desde abajo, donde está la placa que conmemora este equipamiento.
El siguiente tramo también tiene su miga. Deberemos introducirnos por el agujero que se ve bajo la roca empotrada superior, y así poder llegar a este otro descenso vertical, equipado con grapas a modo de escalones y una cuerda para asegurarse.
Ya superados esos tramos equipados, empezamos a ver como se asoma la Morera de Montsant.
Mirando atrás, verticalidad en la cara Sur del Montsant.
Tras las emociones del Grau del Carrasclet, vendrá un cómodo descenso por sendero hacia la Morera de Montsant, atravesando la zona de la Devesa...
... pasando por alguna pequeña cueva...
... y disfrutando de las vistas de la imponente cara Sur del macizo.
Les Tres Roques, junto al sendero.
Casi llegaremos a la Morera de Montsant, porque el sendero que sube hacia lo más alto de la Serra Major lo cogeremos cerca de la parte alta del pueblo. De todas formas, si queremos bajar a tomar algo o avituallarnos, serán escasos cinco minutos.
Este es el sendero por donde hemos bajado.
Estamos en el sendero que sube de Morera de Montsant hacia la Serra Major. Cerca del pueblo todavía, esta área recreativa.
El sendero, muy definido, sube para buscar la parte alta del Montsant.
Morera de Montsant va quedando abajo...
... mientras nubarrones amenazadores se van cerrando sobre la zona.
Morera de Montsant y el sendero que asciende por la ladera.
Pasamos el Grau de la Grallera, que no ofrece ninguna complicación ni obliga a poner las manos, pues se trata simplemente de ir esquivando algunos bloques de piedras. Al poco rato, el camino se dulcifica.
Tenemos a la vista la parte alta de la Serra Major.
Ya estamos arriba y, si nos fijamos, al final podemos ver la torre que marca la cima del Piló dels Senyalets.
Los barrancos que descienden por la cara norte, mucho más suave que la sur.
Llegando al Piló dels Senyalets, al final de la Serra Major.
No falta tampoco aquí el típico cartelito que indica las direcciones.
Piló dels Senyalets (1.107 m).
Vistas hacia el Oeste...
... con los parques eólicos.
Los nubarrones empiezan a descargar intermitentemente nieve granulada...
... por lo que toca batirse en retirada, a ver si me meto en una zona donde no me moje, pues los chaparrones son muy localizados.
Se trata de ir siguiendo toda la cresta del Montsant durante 4 kilómetros, a contar desde el Piló dels Senyalets y hasta llegar al desvío que baja al Grau del Carabassal.
El Mediterraneo como telón de fondo.
Llego al desvío que baja en dirección Norte hacia el Grau del Carabassal...
... y a bajar toca! Con precaución, pues esta zona es resbaladiza debido a que es piedrecilla suelta sobre terreno duro.
Excelente atalaya!
Justo antes de meterme en la parte equipada del Grau del Carabassal, otro cartelito me indica que el camino que yo busco es el que va por esta cornisa, esta especie de "faja" que recorre los enormes acantilados. Visto desde aquí impresiona un poco, pero una vez metido, al ir siempre entre árboles, no da ninguna mala sensación.
El senderito se abre paso por donde puede, arrimándose a la roca...
... o pasando entre ella.
Pese a estar "colgados" en la pared norte de la Serra Major, nadie lo diría viendo esta zona.
Salimos de la faja para meternos en esta zona mucho más cómoda.
Un habitante de las montañas me observa inquieto...
... pero yo voy a lo mio y sigo disfrutando de las instantáneas que me ofrece este macizo.
Ahora el sendero vuelve a arrimarse al borde del precipicio. Cuidadín aquí con hacer tonterías pues la caída sí que es completamente vertical.
Asoman tras los riscos Cornudella de Montsant y el Pantano de Siurana.
Tras pasar por las inmediaciones de la Cova Santa, vuelvo a mirar hacia el Sur para iniciar el descenso definitivo. Será por el Grau del Tomaset y siguiendo el GR-174-1, sin ningún tipo de complicación.
Esto es parte del descenso...
... siempre con grandes vistas...
... y sin ninguna dificultad.
Un par de panorámicas de este descenso, muy agradecido en cuanto a vistas.
Abajo puedo ver, si me fijo, la Ermita de Sant Joan del Codolar y el camino que deberé seguir por la ladera de la montaña, con poco desnivel.
Este es el desnivel que he perdido por el Grau del Tomaset.
Llego a Sant Joan del Codolar. Codolar viene de "codols" o bloques de piedras desprendidos de los riscos. Y es que esta ermita está rodeada de ellos.
Es una zona muy agradable para darse un garbeo. Aquí vive desde hace más de 30 años una ermitaña, completamente sola, sin agua ni electricidad. Vive austeramente de su artesanía, unos puntos de libro con flores y hojas que recoge y pinta elaborados iconos.
Un punto para abastecernos de agua.
Y ya saliendo, esta zona con barbacoas.
Aquí apreciamos claramente los "codols" o bloques de roca que hay ido cayendo y rodean la ermita.
De aquí hasta prácticamente el final, el sendero irá recorriendo a media ladera los Cingles de Sant Joan, con poco desnivel.
Pasaremos por esta roca donde podremos ver algunos pesebres...
... y seguiremos con este largo flanqueo en el que vemos todo lo que nos falta.
En este cruce es donde tomaremos clara dirección Norte para meternos en el tramo final de la excursión.
Buscando el final de etapa...
... con Albarca ya a la vista.
Entre amapolas, llegaremos al Collet Roig...
... y recordamos que por aquí ya estuvimos a primera hora de la mañana.
Apenas 10 minutos más y llegamos a Albarca, donde hemos dejado el coche justo delante del Refugio. Vemos que ahora la zona está un poco más concurrida.
Y así damos por finalizada esta interesante y larga ruta, primera toma de contacto con la Serra del Montsant.
Hasta la próxima!!!
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