Ruta realizada el 21/11/2015
Una buena ruta para coger fondo y acostumbrar al cuerpo a las largas caminatas. No me iré muy lejos de casa. En unos 40' de coche me pongo en Sant Pere de Torelló. El dia no acompaña, ha llovido algo durante la noche y hay mucha humedad en el ambiente, aunque no hace excesivo frío. Tras un ligero desayuno, cargo algo de comida, una botella de agua y ya estoy preparado para empezar.
Son las 8 en punto de la mañana cuando empiezo a caminar en el aparcamiento que hay a la salida del pueblo, dirección Coll de Bracons. Lo primero que hay que hacer es atravesar el pueblo hacia el norte pasando, entre otros, por la iglesia.
Luego una calle muy empinada con unifamiliares a ambos lados nos sacará del pueblo.
En el kilómetro 1.1 de ruta, ya fuera de Sant Pere de Torelló, pasaremos junto a este gran depósito.
El sendero está marcado, y encontraremos hitos en las zonas más rocosas, donde se pierde la senda. Un grupo de runners con su perro me adelantan.
En las zonas de arbolado el sendero es muy evidente.
Iremos siempre por sendero, cruzando varias veces la carretera que sube hasta lo alto del Santuari de Bellmunt.
Kilómetro 2.8 de ruta. Pedró de Montserrat. Acabamos de salir a la carretera y la seguiremos unos metros, hasta encontrar de nuevo el sendero que la evita y sube directo.
Font Vidranesa. También junto a la carretera, que solamente hemos cruzado pues el sendero sigue hacia arriba.
El sendero es ancho y evidente.
Bien entrado el otoño, todo está tapizado de hojas.
Kilómetro 4.1 de ruta. Llegamos al párking que hay bajo el Santuari de Bellmunt. Podemos acceder a la cima por la pista encementada o seguir por un sendero.
Sendero con escalones que nos lleva hasta lo más alto de la montaña.
Vistas hacia la Plana de Vic. El dia no acompaña, de momento.
Las cabras que no faltan junto al santuario.
Ya estoy arriba. Remataré la ascensión subiendo al promontorio donde está la cruz.
Cruz en lo más alto de Bellmunt. Llevo 4.2 kilómetros de ruta.
Bellmunt (1.248 m). Detrás mio el santuario.
Plana de Vic. Visibilidad regular.
Santuari de Bellmunt.
Paso junto al santuario para encontrar el sendero que desciende hacia el Coll d'Era de Massa.
Un sendero completamente tapado por las hojas que las hayas han perdido.
Descenso hacia el Coll d'Era de Massa.
Kilómetro 5 de ruta. Coll d'Era de Massa. El sendero pasa a ser pista forestal, pero igual de lleno de hojas, por lo que apenas apreciamos la diferencia.
Tras andar un rato por la pista, cogemos otro sendero que ya nos manda por lugares mas angostos.
Avanzando por bosques claros de jóvenes ejemplares.
Kilómetro 7.4 de ruta. Tosca de Degollats. Seguimos el sendero que marca hacia Vidrá.
El sendero en cuestión tiene poco desnivel y es muy agradable.
Luego pasaremos junto a una linea eléctrica...
... y la seguiremos un rato.
Poco desnivel en este tramo de ruta.
El sendero nos ha dejado en una pista forestal que va hacia vidrá, bastante cerca de aquí. Tras andar un rato por la pista, nos encontramos con este indicador. Un sendero desciende hasta el Salt del Molí. Estamos en el kilómetro 8.4 de ruta y cogeremos el citado sendero.
El sendero baja con ganas en busca del rio Ges.
Salt del Molí. Kilómetro 8.6 de ruta. Si en verano sigue habiendo agua, se me antoja un lugar para venir a refrescarse muy interesante.
Siguiendo las marcas del PR junto al rio Ges.
Luego el sendero, siempre con tendencia a subir aunque con bastante pereza, va hacia el Este en busca de la Serra de Curull.
En el promontorio del fondo atisbamos el Santuari de Bellmunt. Entre él y nuestra posición están los bosques por donde nos hemos estado moviendo.
El sendero va ascendiendo, siempre evidente.
En un momento dado salimos a una pista forestal, aunque la seguiremos poco rato.
Alguna casa aislada entre el bosque que el otoño ya ha vuelto rojizo.
Vamos siguiendo el sendero, bastante horizontal...
... que nos lleva a observar diversa tipología de bosque.
En realidad estamos remontando el curso del Torrent de la Salgueda, aunque al estar algo separados del lecho no lo parezca.
Kilómetro 11.7 de ruta. Casa de la Salgueda, comida por la vegetación y en estado ruinoso.
Pasamos junto a las ruinas en busca del sendero que, ahora sí, en fuerte subida nos llevará a la zona alta de la Serra de Curull.
Sale el sol por fin, y empieza a hacer calor de verdad.
La subida, pese a ser dura, es agradable por el tipo de bosque que nos acompaña.
encontramos algunos pasitos estrechos y con roca, que amenizan un poco el tema.
La Serra de Curull.
Salimos a la parte alta del cordal en el kilómetro 13 de ruta. Ahora iremos por la vertiente sur de la sierra, cerca de la parte más elevada pero evitando las puntas, y pasando por una sucesión de collados.
Sendero en permanente flanqueo.
Aparecen las primeras indicacions al Puigsacalm.
Avanzando por el bosque, mientras la niebla se ha apoderado de la zona alta de la montaña.
A ratos se abre y disfrutamos del bosque en todo su esplendor.
Kilómetro 14.4 de ruta. Coll de Joan. Seguimos en busca del siguiente collado, alternando vertiente norte con vertiente sur, siempre muy cerca de lo más alto.
El sendero se deja seguir sin dificultades.
Kilómetro 15 de ruta. Collet de la Foradada. Seguimos avanzando!
Los ratos de sol empiezan a ser más frecuentes, y yo que me alegro.
Kilómetro 15.1 de ruta. Coll de Gallina.
A ratos la niebla nos da un aspecto fantasmagórico.
Pero luego sale el sol y nos deja intuir el Puigsacalm delante nuestro.
Kilómetro 15.7 de ruta. Collada de Sant Bartomeu. Ahora iremos todo el rato por la vertiente Noroeste de la sierra.
Se nota que es vertiente norte. Húmeda y sombría en noviembre.
Kilómetro 17 de ruta. Font Tornadissa. Aprovecho para refrescarme.
Justo pasar la fuente, salimos a terreno abierto. Vista atrás.
Me cruzo con gente que ya baja del Puigsacalm, mientras gano altura y amplío las vistas.
En estas zonas de pradera, como era de preveer, el sendero esta marcadísimo.
Ascendiendo por los Rasos de Manter.
Un grupito observando al Pedraforca y la Serra del Cadí, a lo lejos.
Tras pasar una puerta en una valla para el ganado, el sendero se vuelve tal que así. Estoy en el kilómetro 17.7 de ruta.
Vista atrás para ver el sendero amplio que me acerca al Puigsacalm.
Paneles indicativos en los cruces de senderos.
Nuestro sendero se empina en busca de la cima, que ya podemos ver tras los árboles.
Último panel antes de la cima.
Bajo este gran árbol encontramos un pequeño botiquín, con material básico para caso de alguna herida.
Kilómetro 18.6 de ruta. Llegando a la cima del Puigsacalm, estas vistas. La cámara de fotos ya hace rato que tontea, y al llegar a la cima deja de funcionar. Así que, por desgracia, no tengo foto en la cima, ni de las espectaculares vistas hacia la zona de Olot.
Ya descendiendo el Puigsacalm, la cámara vuelve a funcionar a ratos. Tonos verdes y ocres en esta zona de praderas.
Avanzo hacia el Suroeste por lo más alto de la sierra siguiendo un marcado sendero. Es la subida normal al Puigsacalm desde el Coll de Bracons.
Preciosas praderas en la zona alta de la montaña.
Siguiendo un sendero donde es imposible perderse.
Disfrutando de grandes vistas hacia el Oeste.
Vemos como el sendero corta la ladera.
Vista atrás. Las nubes empiezan a cargarse.
Como me pilla de camino, decido hacer la cima del Tossell Gros, y así me apunto una cima que no tengo. Estoy en el kilómetro 20.7 de la ruta.
El Tossell Gros (1.461 m).
Buzón y "arte abstracto" a base de cucharillas dobladas.
El Valle de Joanetes desciende en busca de la amplísima Vall d'en Bas. Por la derecha la Serra dels Llancers.
La carretera que sube al Coll de Bracons desde Sant Pere de Torelló.
Tras el Tossell Gros viene el Tossell Xic, y su descenso es la parte más técnica (por decir algo) de la jornada. Cadenas y cuerdas nos ayudarán en la bajada. Primer tramo.
Segundo tramo de cadenas.
Cadenas alternando con cuerdas con nudos nos ofrecen los agarres suficientes para ir tranquilos.
Siguiente tramo de cadenas.
Por estas placas se baja, ayudados de la cadena.
Tras descender esa parte más inclinada, el sendero se vuelve más dócil en busca del Coll de Bracons.
Pero vuelve la impredecible niebla!
Bosque en la cara Sur de la montaña.
Kilómetro 21.8 de ruta. Llego al Coll de Bracons. Un sencillo destrepe nos dejará en la carretera.
Cruzo la carretera y me meto en una pista forestal, que va en busca del bosque de la Grevolosa.
Al rato, cogeré un sendero, abandonando la pista, y entrando en el Bosc de la Grevolosa.
Kilómetro 22.2 de ruta. Bosc de la Grevolosa.
Sigo el sendero que cruza el bosque sin perder demasiada altura...
... para llegar a la ermita de Sant Nazari, en el kilómetro 23.3 de la ruta.
Tras la ermita nace un sendero muy preparado, con escalones artificiales e incluso este puente, que nos desciende siguiendo el Torrent de la Grevolosa.
Torrent de la Grevolosa y un panel en la entrada del bosque que yo estoy a punto de abandonar. Aquí cerca hay un aparcamiento al que se puede llegar en coche por una pista cementada.
Siguiendo la citada pista, no tardaré en llegar a la Feixa Llarga. Estoy en el kilómetro 24.3 de ruta y ya casi todo lo que me queda son amplias pistas forestales.
Siguiendo la pista que, entre campos, me acerca a las instalaciones de la boca Oeste del Túnel de Bracons.
Cruzaremos varias veces el rio Fornés.
Bonita tarde está quedando!
Siempre por la pista, llego a los Plans de Piguellem, donde están las instalaciones de control del Túnel de Bracons.
Can Piguellem, restaurante y masía en el kilómetro 26.7 de ruta.
Cruzamos la carretera que sube al Coll de Bracons y pasamos por el Veinat de Dalt.
Un buen sendero nos acercará a los Plans de Llombregueres.
Kilómetro 27.6 de ruta. Plans de Llombregueres. Aquí hay que fijarse bien en las marcas, pues es fácil despistarse.
Tras cruzar los llanos, llegaremos a la casa de Llombregueres. Parece ser que se usa como casa de colonias, pues en el prado que está detrás, tapado por la casa, hay un montón de crios con los monitores.
Y justo tras la casa la cámara de fotos muere definitivamente. Tampoco queda mucho. Un tramo de sendero ascendente, siguiendo el curso de lo que parece ser una riera, nos llevará hasta la Creu del Coral, en el kilómetro 28.7 de ruta.
Ahí ya salimos a la pista forestal, que no abandonaremos hasta llegar a Sant Pere de Torelló, siguiendo las indicaciones en los diversos cruces por los que pasaremos.
Pena de no haber podido fotografiar el recorrido completo... habrá que repetirla pues! jejeje
Qué bien te lo pasas, Fernando,,,,,, ya te recorriste medio mundo con la bici, ahora veo que lo haces a pata. Eres un fenómeno. Un saludo desde Nonaspe.
ResponderEliminarHola Miguel! No creas, ahora también salgo más en bici, porque al chaval le ha dado por querer subir CIMAs y claro... yo con él, jajaja. Un saludo y a ver si algún dia cimeamos todos juntos!
ResponderEliminar