El Tretzevents, que en francés han rebautizado como Tres Vents (cargándose 10 vientos de una tacada) es el segundo pico más alto del macizo del Canigó. Además, pertenece a la lista de "100 cims". Ya por estas razones, se merece una visita. Pero además, nos garantiza una ruta larga y con buen desnivel, lo cual es perfecto para ir cogiendo la forma de cara a futuros retos.
No hay ninguna carretera que te deje cerca. Elijo la ruta que parte del pequeño nucleo de La Llau, situado entre Prats de Mollo y Le Tech, y al que llegaremos conduciendo por una carreterita estrechísima, donde continuamente vas rezando para no encontrarte a nadie de cara.
Como daban vientos muy fuertes a partir de mediodía, valoro que hay que hacer cima antes de las 11, por lo que a las 6 de la mañana empiezo a caminar, haciendo hora y media de noche con el frontal. No hay problema, primero el sendero y luego la pista forestal no dan posibilidad de pérdida.
Amanece cuando supero la zona llamada Les Troncasses, que es el punto donde se inicia la circular. Hasta aquí, el trayecto de ida y vuelta será común.
Siguiendo el sendero observo al fondo mi objetivo, a la derecha de la Porteille des Tres Vents.
Cabane de la Jasse des Troncasses. La entrada está pegada a la ladera de la montaña, evitando así que se meta la nieve empujada por el viento. Justo sobre su tejado está la cima del Tretzevents.
El sendero asciende por la ladera este de la montaña, paralelo al fondo del Valle de Coumelade. En el otro lado tengo todo el cordal que luego, a la vuelta, y si el viento me lo permite, espero recorrer.
Sendero evidente en la mayor parte del tramo, aunque a veces los arbustos lo esconden un poquito.
Paso algunos neveros sin complicaciones pues la nieve no está helada.
Al fondo tengo la Porteille des Tres Vents y a su derecha el Tretzevents. Pienso que el recorrido va a ser largo, y valoro la posibilidad de cruzar al otro lado del valle y subir directo por la ladera hasta la cima, pues se ven muchas zonas sin nieve.
Vista atrás. Como vemos, se sube bien por aquí.
empiezo a estudiar el terreno, buscando una zona por donde pasar al otro lado sin perder apenas altura. Parace que ahí delante eso será posible. Haré este flanqueo y luego veremos.
Acercándome a la zona donde preveo cruzar el torrente.
Por aquí, apenas unos metros de bajada y cruzo al otro lado. Luego buscando evitar la nieve subiré directo hasta la cima del Tretzevents.
Cruzando el Torrente de Coumelade.
Ya estoy al otro lado! Ahora a subir por esta ladera que tampoco se ve muy inclinada.
Abajo queda el valle por donde he subido...
... y en frente el majestuoso Puig Roja, solamente 7 metros más bajito que nuestro Tretzevents.
Subo por aquí, evitando la nieve que está durita.
El Puig Roja, apetitoso!
Valle de Coumelade y Puig Roja.
Vista atrás para ver la zona ascendida.
Evitando la nieve lo máximo posible, jeje.
Esta pala nevada no la voy ni a pisar.
Preciosa imagen del Puig Roja y el Valle de Coumelade.
Zoom al Costabona, el pico que subimos ayer Alberto y yo.
Ahí vemos el lomo por donde espero bajar luego, si el viento lo permite.
Se amplian las vistas, precioso!
Al fondo ya tengo la cima del Tretzevents. Más cerca la antecima, ambas con antenas y placas solares.
Me olvido de la antecima y tiro directo para la cima.
Dejo la antecima atrás. A la vuelta ya pasaré por ella.
Costabona.
Puig Roja y Porteille des Tres Vents.
Me acerco a la cima del Tretzevents.
La cima y detrás el Canigó y el Puig del Roc Negre.
Canigó. Pla de Cady a sus pies.
Antenas en la cima del Tretzevents.
Piolet en la cima del Tretzevents.
Detalle del piolet.
Tretzevents (2.731 m). Son las 10:30 de la mañana, cumplido el objetivo de coronar antes de las 11.
El macizo del Canigó, con la cima homónima al fondo. En primer plano el Puig del Roc Negre,
Puig del Roc Negre sobre el Valle de Riuferrer.
Majestuosa la cara sur del Canigó.
Piolet en la cima del Tretzevents.
Me voy del piolet a las antenas de la cima, para iniciar el descenso...
... mientras miro y remiro el Puig Roja, y me lo apunto en tareas pendientes, a poder ser con nieve que me gusta más.
La Porteille des Tres Vents y el cordal que habría recorrido si hubiera seguido la ruta normal.
Zoom al Carlit...
... y al Costabona.
Valle de Riuferrer y Plans du Canigó por el norte.
Canigó y la famosa chimenea por donde se accede a la cima. Se aprecia el sendero de aproximación.
Antenas en la antecima del Tretzevents.
Como el viento lo permite, descenderé por todo este lomo, hacia el sureste, en busca de la Collada dels Pastors.
Ahora, a diferencia de la subida, sí que buscaré las zonas nevadas, para bajar con mucha más comodidad.
Pic Gallinasse.
Vista atrás, para ver el trozo que ya he bajado...
... buscando la nieve, como vemos, jeje.
Pero aun queda mucho lomo por bajar.
Sin complicaciones, no se estrecha en ningún momento.
Algún incómodo tramo de piedras que miraré de evitar...
... buscando zonas más herbosas a falta de nieve.
Luego llego a un cercado para el ganado que me servirá de guía. Alguien que pasó antes que yo también aprovechó la nieve, jeje.
Vista atrás!
Paso por un primer collado, la Collada Llisa, donde hay un vivac.
Vista atrás, muy lejos ya queda la cima de hoy.
El tramo final entra en bosque bastante claro.
Ahí abajo ya veo la Collada dels Pastors, punto donde abandonaré el lomo.
Dejo el lomo y sigo por un sendero que flanquea en descenso la vertiente sur de la montaña.
El sendero flanqueando en busca del aun lejano Valle de Coumelade.
Fácil de seguir.
Veo una cabaña, por la que voy a tener que pasar.
Descenso hacia la cabaña.
Cabane Vieille. Bien atrancada la puerta con un palo y un montón de piedras, aunque sin cerradura.
Veo desde la cabaña como el sendero flanquea esa ladera mientras pierde altura poco a poco.
Siguiendo el sendero.
En las praderas de la derecha de la foto he dejado la cabaña.
Luego ya se trata de bajar al torrente por la directa, siguiendo unos pasillos herbosos entre los arbustos, bien marcados con hitos.
Antes de llegar al fondo, un tramo más de bosque.
Ahora sí, llego al Torrente de Coumelade.
Un buen sitio para refrescarse en verano. Hasta aquí llega una pista forestal.
Pequeña presa y por encima la montaña que he bajado.
Buen sitio para el verano, si señor!
Más cascadas, artificiales, en el Torrente de Coumelade.
El lomo que he recorrido por lo alto y luego la ladera bajada en flanqueo.
Tras el torrente ya me muevo por pistas forestales.
Vuelvo a Les Troncasses, donde se cierra el bucle. Ahora ya se trata de deshacer el camino de subida.
La pista también nos ofrece bellas instantaneas.
Tramos más umbríos...
... y otros más soleados. Aunque no lo parezca, estamos a principios de enero.
Puente sobre el Torrent de Coumelade...
... y pista para abajo!
Llego a Saint Guillem, con estas vistas hacia el terreno por donde ha discurrido mi ruta de hoy.
Saint Guillem.
Un poco más abajo este refugio, muy coqueto pero cerrado.
Vemos el refu, hasta el que se llega en vehículo.
Tras el refugio sale el sendero que lleva hasta La Llau.
Es un sendero interpretativo, con muchos paneles informativos de la flora y botánica del lugar.
Pasaremos por algún torrente donde nos podremos refrescar. Y que diga esto en enero!
Bonito!!!
Sendero rápido, con poca piedra.
Ideal para correr, los que tengan prisa.
Alguna zona más interesante...
... y seguimos con la misma tónica.
Da gusto andar por aquí. Voy despacito porque no quiero que se acabe.
Pequeñas cascadas en otro torrente.
Cae pronto la tarde y entro en sombras.
Aunque aun puedo disfrutar un ratillo más del último sol de este domingo.
Llego a la civilización...
... en el pequeño nucleo de La Llau.
Y aquí, en la carretera, justo donde se inicia la pista por la que estoy bajando, llego al aparcamiento donde he pasado la noche y empezado la ruta que ahora termina.
Esto ha sido todo, me voy contento con mis más de 2.000 metros de desnivel en las piernas, y pensando ya en la próxima.
Nos vemos en breve!
Eres mi idolo, aunque me gustaria saber de dónde sacas el tiempo ;-)
ResponderEliminarXavier.
Ummmm... para hacer las rutas o para hacer la crónica? jajajaja ;-)
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