Montañas del Ebro con aires de otoño

Tenía mucho aun por descubrir en esa zona: el puerto de Bot, la Fontcalda, los pueblos de Pauls y Alfara de Carles...

Viendo el perfil, alguien se preguntará "ahí falta algo, falta el Mont Caro!". Pues sí, falta, y estaba en la ruta diseñada, pero el fortísimo viento que azotó la zona todo el dia hizo que fuera imposible ni siquiera planteárselo. Ya en la subida a Cardó estuvo a puntito de tirarme barranco abajo, y solamente estaba a 500 metros de altitud.... ni pensar lo que sería en el Mont Caro!!! Con todo, quedó una etapa bastante apañada, aunque de desnivel quedó algo recortadita.

Como la etapa se prevee larga y los dias son cortos, me va a tocar hacer bastante rato de noche. Por eso, pongo la salida en Rasquera, para que los kilómetros iniciales nocturnos sean por la zona menos interesante, siguiendo la carretera C-12, ancha y con poco interés.

Aun es de noche cuando paso al lado de la Central Nuclear de Ascó, inicio del puerto de La Fatarella, el más duro del dia.

Hago la subida a La Fatarella acompañado por el amanecer, poco a poco desaparecen las sombras y se hace la luz, pero hasta llegar arriba del todo, al pueblo, no sale ninguna foto buena.

Amenazador el aspecto del cielo, aunque no son las nubes lo que más miedo dan, sinó el aire.

Enorme el parque eólico que hay por aquí arriba.

Llego a Gandesa, capital de la Terra Alta.

Por carreteras vecinales dejo atras Gandesa y voy en busca de Bot, donde empezará el siguiente puerto de montaña.

La zona dels Ports sigue sin ofrecer aspecto tranquilizador, aunque es bien sabido que cuando hace tanto viento es dificil que llueva.

Tras dejar atras el pueblo de Bot, empiezo a subir el Coll de Bot.

Carretera en buen estado y no demasiada dureza, hacen que éste sea un puerto para disfrutarlo.

Una buena pespectiva de la zona que voy subiendo.

Tranquilísima zona, ningún vehículo a motor en toda la ascensión.

Una interesante sucesión de curvas.

Es un puerto que, pese a no tener nada que lo haga especial, se hace ameno.

Últimos metros, ya cerca de la cima.

Desde la cima, ahora tengo que bajar a este Barranc de l´Hostal, enfrente tengo la Serra dels Corrals.

Cruzaré el pueblo de Prat de Comte...

... donde gustosamente haré una primera parada a repostar agua en esta fuente.

Tras un rápido descenso, llego a la Via Verde de la Terra Alta, que aprovecha el trazado del antiguo ferrocarril y discurre durante más de 23 kms por unas zonas muy espectaculares.

Muy bien arreglada, esta Via Verde conserva los túneles del ferrocarril y es ideal para hacer excursiones, ya sea a pie o en bicicleta.

Yo recorreré unos cientos de metros por esta Via Verde, atravesando este túnel ténuemente iluminado por unos pequeños focos, hasta volver a encontrar una carretera asfaltada que me permita seguir mi ruta.

Llego así a La Foncalda. Se trata de un conjunto de edificios que acompañan a una ermita, en una zona de fuentes termales, impresionante su ubicación dentro de un paraje natural de gran belleza y construcciones geológicas casi únicas en el mundo, que resaltan por la disposción en vertical de los sedimentos.

El Rio Canaletes y las paredes verticales.

Hoy no, que hace frio, pero pasar por aquí en verano debe ser obligado pegarse un buen bañito.

Precioso paraje!

Ahora debo tomar esa carretera que sube en fortísima pendiente.

La pista se vuelve bastante mala, con mucha piedra en la carretera y baches, que sumado a la fuerte pendiente hace que sea bastante complicado superar este tramo.

Zona muy salvaje!

En el fonde de todo queda La Fontcalda, todo eso he subido en pocos kilómetros.

Sigo subiendo, ahora ya con menos pendiente y gozando de estos paisajes verdes.

Llegando a la cima del Coll d´en Torner.

Un instante para disfrutar del silencio aquí arriba, antes de bajar y salir a una carretera general.

Emprendo ahora rápida bajada buscando la C-43, cerca de Gandesa.

Tras bastantes kilómetros por carreteras anchas y ya con algo més de tráfico, llego a Xerta.

Ahora iré a conocer un pueblo, Pauls, y la prolongación hasta la Ermita de Sant Roc.

El viento se vuelve insoportable y a ratos ya peligroso en esta aproximación a Pauls.

Lo tengo a la vista, pero cuesta muchísimo avanzar.

Dejo atrás el pueblo y sigo subiendo hasta llegar a esta zona, próxima a la Ermita de Sant Roc.

Un bonito y tranquilo merendero, con sus barbacoas y todo...

... y con abundante agua! Vuelvo a repostar!

Media vuelta y bajo por donde he subido. Observo el pueblo de Pauls resbalando por la ladera de la montaña.

Me meto luego por unas pistas asfaltadas sin categoría de carretera, bajo un vendaval tremendo. Cruzo sobre el Canal Xerta-Calig, hoy seco.

Estas pistas me llevan hacia lo desconocido, y el aspecto no es muy agradable.

Pero el resultado final es bueno, el precioso pueblo de Alfara de Carles.

Tras decidir que hoy es imposible subir al Mont Caro, prosigo la ruta y atravieso el Ebro en la ciudad de Tortosa. Veo el monumento a los caidos en la Batalla del Ebro.

Imagen de la ciudad de Tortosa, desde el puente sobre el Ebro.

Cojeré ahora una carretera que remonta el curso del Ebro, dejando el rio a la izquierda. Por el otro lado del rio va la general, mucho menos atractiva que ésta por la que yo circulo.

Siempre estoy acompañado por el Canal de l´Esquerra de l´Ebre, y por el fuerte viento, claro.

Mirando hacia el Mont Caro, cada vez más me alegro de no haberme aventurado a subirlo.

Paso por el pueblo de Tivenys, al borde del Ebro.

Y justo a la salida del pueblo empieza el Coll de Som.

Bajaré por este lado, de nuevo a buscar el rio Ebro, tras alejarme de él durante la subida y bajada a este puertecillo.

Pronto vuelvo a tener a la vista las azules aguas del Ebro.

Grande y caudaloso!

Llegando a Benifallet, la fruta estará buena.... pero el cartel hace daño a la vista!

Un meandro del Ebro, cercano a su desembocadura.

Bonita imagen del rio Ebro.

Llego a Rasquera, punto de inicio de la etapa, y como aun queda luz me decido a subir al Balneario de Cardó.

La carretera se abre paso por la roca teniendo que recurrir a algun túnel.

La tarde cae rápidamente, las sombras se alargan y el viento no cesa.

Me falta ya poco para terminar esta subida.

Tengo ya a la vista el Balneario.

Aquí lo tenemos, en lo alto de la roca, el Balneario de Cardó. Funcionó hasta 1967.

Y tras un rápido descenso hasta Rasquera, donde conseguí llegar con algo de luz, doy por terminada esta etapa, un poco deslucida por el fuerte viento pero que me ha permitido conocer muchas sitios que tenía en mente.

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